Periodico:
La Voz de Galicia.
Fecha:
Sábado, 25 de Abril.
Enlace
a la noticia:
http://www.lavozdegalicia.es/noticia/sociedad/2015/04/25/denuncian-fuel-roza-costas-tenerife-gomera/00031429991144739257602.htm
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Comentario
personal:
El
incendio de un pesquero amarrado en el puerto de Las Palmas de Gran
Canaria, el Oleg Naidenov, de bandera rusa, con cerca de 1.500
toneladas de fuel a bordo, hizo saltar la alarma el pasado sábado.
Tras varias horas intentando apagar el fuego, la autoridad portuaria
tomó la decisión de remolcar el barco a alta mar “por razones de
seguridad; para evitar daños a las instalaciones portuarias, así
como para evitar que las costas del archipiélago queden afectadas en
caso de derrame”.
Se
trata de una maniobra muy desafortunada, que demuestra lo poco que
aprendimos del accidente del Prestige. Si bien la maniobra de
alejamiento asegura que las consecuencias del accidente pasen más
inadvertidas, el riesgo medioambiental no disminuye, sino que
aumenta. Mucho más acertado hubiera sido acondicionar un muelle al
que poder trasladar el barco sin riesgos importantes para las
instalaciones portuarias, o bien remolcarlo a una bahía cercana,
seleccionando un área de escaso valor ecológico, donde se pueda
acotar un posible vertido (por ejemplo con el uso de barreras
flotantes).
Remolcar
el barco a alta mar supone perder el control sobre la situación,
incrementando el riesgo de un vertido, que al mismo tiempo sería más
difícil de controlar. De ocurrir, las corrientes podrían repartir
la mancha de fuel por un área difícil de predecir, probablemente
alcanzando las costas del archipiélago en algún punto indefinido. Y
eso acarrearía el riesgo de que llegara a zonas de gran valor
ecológico de las islas cercanas.
Pero
incluso aunque el vertido no alcanzara las costas del archipiélago,
no hay que olvidar que el medio pelágico, es decir, el mar abierto,
también alberga una importante biodiversidad, particularmente
valiosa en aguas de Canarias: diversas especies de cetáceos,
tortugas y aves marinas amenazadas frecuentan las aguas oceánicas
del archipiélago canario, además de numerosas especies de peces
(algunas de gran importancia comercial, como el atún) y otros
organismos marinos. En el caso de las aves, cabe recordar que
Canarias es un santuario para la reproducción de pardelas, petreles
y paíños, todas ellas especies que se alimentan lejos de la costa.
El
episodio ha evidenciado la falta de protocolos de actuación ante
este tipo de emergencias, un hecho particularmente grave cuando el
accidente del Prestige debería haber servido, por lo menos, para
aprender de nuestros fallos.